El genio del sentimiento hacia
los amigos, no sale siempre de corazón cuando perdemos a un amigo de verdad. Y
cuando ese amigo se ha ido hace unos cuantos días y uno se entera días después
de la enorme pérdida que ha tenido caben dos cosas: primero pedir perdón por la demora
en reconocer y publicar como él se merecía la tristísima noticia de su
muerte. Segundo hacerle llegar a Reinaldo su hijo que le hace honor a su
apellido a la capacidad y a todas las buenas costumbres que Harold Martino en vida nos enseño a todos. No recordamos una
sola imagen de él que cambie en nuestra memoria su rostro siempre sonriente,
siempre trabajando, siempre sembrando la amistad y la decencia. En Cañada de
Gomez donde hoy esta una casa de venta de artículos para caballeros al lado de
Comarf con su confitería “Delicias” y un montón de cosas que invento para tener
el éxito que siempre tuvo en todas sus cosas y supo trasladar a su hijo un
estilo, una forma de ser y esa forma de reflejar ese don de buena gente que nadie puede
fabricar sino lo traen en el corazón , comimos varias veces en su casa en
Carlos Paz cuando se dedico a negocios inmobiliarios con la misma seriedad y
entusiasmo con que había hecho su confitería “Delicias” en el centro de Cañada
de Gomez .
La perdida de Cañada de Gomez no
fue solo el lugar que quedo vacio de un gran amigo para nosotros
fue un maestro de la seriedad y del trabajo. Y los resultados están a la
vista: hoy los Martinos tienen la mejor
juguetería y librería de Cañada de Gomez. Y una mejor huella que están
siguiendo fanáticamente: la de Harold que se fue que dejó un espacio vacío,
pero que dejo esa huella que los suyo saben muy bien encarrilarla en las cosas
que hacen. Nuestras condolencias a la familia de Harold y una lágrima sobre su
recuerdo que será imborrable.
EL DIRECTOR