viernes, 17 de noviembre de 2017

CUANDO UN CAMINO PARECE EL UNICO Y NO LO ES…



Cañada de Gómez vivió otro drama esta semana. Algo que se está repitiendo a lo largo y ancho de un país que pierde la fe que entren en depresión y que no encuentre una salida satisfactoria para todas sus angustias.
Un joven de 35 años querido y respetado en la ciudad tomó una última decisión que no se dió cuenta no era la última pero le pareció a él porque era la más dolorosa, nunca el suicidio soluciona nada y cada uno de nosotros muchas veces estuvimos increíblemente cerca de pensar que era la única solución que quedaba por tomar.
Lo lloraron sus amigos y sin conocerlo lo lloramos nosotros. Es que hoy en la Argentina la enfermedad más conocida y no tratada debidamente es la depresión, es la angustia, es el pánico, y es la traición de los políticos que le prometen al pueblo antes de las elecciones una cosa y luego de lograr la confianza del pueblo hacen exactamente lo contrario. Y no crea que hablamos de este gobierno de Macri, que le prometió a los viejos el 82% móvil y ya en el poder le congela los insuficientes aportes jubilatorios con que la clase pasiva debe subsistir. Esto empezó con Frondizi y de ahí en adelante entre golpe de estados y políticos sin conducta ni moral siguen dándole al pueblo para pensar como equivocadamente pensó en Cañada de Gómez esta semana un apreciado joven de 35 años que no encontró como pedimos nosotros hoy una institución organizada que lo sacara de ese pozo depresivo que mucha gente, demasiada gente, sufre hoy en el país más rico del mundo.
Un amigo nuestro una de estas noches pasadas nos dijo que si el Congreso de la Nación dejara de pagar los hasta 80 sueldos laterales de cada legislador que a su vez ellos mismos se otorgan los sueldos y dietas y gastos reservados como si fueran los dueños del país, no habría pobres en Argentina. Esos motivos le están marcando un destino suicida a mucha gente y hay que actuar rápido para armar comisiones de atención al suicida para evitar que estas cosas vuelvan a suceder y a sugerir soluciones a la gente desamparada y mal respetada por los gobiernos nacionales dejándole equivocadamente abierta la puerta equivocada para una solución que no solo no será solución sino que creara más dolor en sus familiares, en sus amigos, y más ideas equivocadas en tantos mas que no le encuentran la punta al ovillo.
Jamás el suicidio será un camino correcto ni aun en los casos más extremos. No estamos contra la eutanasia, pero si contra la falta de acción social y política.
No es la primera vez que en estas páginas tratamos estos temas como tampoco está en nuestras manos otra cosa.
Pero no hemos hallado aun nuestro objetivo: que gente afectada del mismo mal pueda juntarse para afrontarlo todos juntos. Siempre se llama fácil, porque lo que hoy nos parece insuperable en muchos casos en un día, en una semana o en un mes desaparece y detrás de ese problema nos chocamos de frente con un aire fresco, perfumado, con la bondad de la gente, con las buenas personas, con los buenos grupos de amigos y comprendemos lo hermosa que es la vida que hace tan poco queríamos privarnos de ella por lo que entonces se darán cuenta no era para nada significativo y menos aun solución.
La depresión crece y créanlo: no hay motivos que justifique ofender a Dios con un suicidio.
El Director.