sábado, 1 de septiembre de 2018

PERDONEN QUERIDOS LECTORES. LO TOMAMOS A RISA



En este momento dramático que vive la Argentina, que tal como este diario lo habia anticipado, iba a ser gobernado por un rico nacido en cuna de oro. Hay dos clases de ricos: el que nació rico y todo le fue fácil, no tuvo una cuna y durmió en el suelo, y luego con su trabajo, su imaginación, su esfuerzo se hizo rico, como por ejemplo Castellani y tantos otros. Y otra cosa totalmente diferente es darle el poder, y nada menos que un arma prohibida por la Constitución Nacional como los inmundos Decretos de Necesidad y Urgencia con los que ofendemos a nuestra Constitución y otra muy diferente es el rico que nace en cuna de oro, que cuando es chico le dan todos los vicios, en la escuela tiene la mejor vestimenta, que maneja autos de alta gama desde los 15 años y que está totalmente convencido que todo se compra con plata. Inclusive ser presidente de la Nación, y para colmo con decretos salvajes contra esa constitución que todos juran defender  hasta que dios y la patria se lo reclamen. Podrían agregar en ese juramento para ser más honestos constitucionalmente salvo, luego del juramento que le hagan decir a legisladores, presidentes y demás que juran por ese libro sagrado “Que Dios y la patria nos lo demanden, salvo que usen los decretos de necesidad y urgencia que no entran en este juramento”.
Acostumbrados, nosotros a recibir ofensas y contestar con sonrisas, que se las hacemos hacer a Saturnino para no tener que putear a alguien, lo tomamos así. Sabemos que una editorial sabiamente escrito por un intelectual de la política tendría que ser muy diferente a este de Estrella. Pero nosotros sabemos que es PUEBLO, y el pueblo argentino ya se tragó todos los pescados podridos habidos y por haber, con Videla, Menem, de la Rúa, Cristina y Macri. Para colmo la locura de nuestros presidentes fue de menos a más.
Llegando a un hoy, cuando sube un presidente el dólar a $13, habla de transparencia cuando él y su padre estafaron al país con el negocio del correo y prometen un gran futuro metiendo en menos de tres años el dólar norteamericano a $42 y sigue subiendo preanunciando la catástrofe inimaginable, que no entendemos porque tiene que ser nuestra moneda corriente y por eso hoy, en este acto ridículo de Estrella propone que no se impriman más pesos, sino Saturninos, pero que su costo arranque a la par del euro y no a la sombra del dólar.
Entendemos que volverán a ofenderse los ya ofendidos que creen que quitándole un aviso a Estrella va a mejorar en algo la desocupación, el hambre, los despidos y la catástrofe económica que significa los decretos de necesidad y urgencia mal paridos por un gobierno constitucional amante de la Dictadura. Perdonen queridos lectores, en nuestras bases siempre fuimos dibujantes y caricaturistas y se nos escapan estas cosas que quizás a alguien ofendan, pero para nada es nuestra intención.
EL DIRECTOR.