Cuando un periodista se encuentra con la realidad, no tiene
más remedio que rendirse a la verdad. Alguien dijo alguna vez “la verdad es la
realidad” nuestra realidad hoy se refleja en un país dirigido por un indio, Evo
Morales el presidente de Bolivia.
Bolivia también tiene petróleo, pero el petróleo de Bolivia,
según la política de este indio que no es ningún ignorante por serlo y es bien
patriota, no un vende patria, ni un ladrón de su propio país, tiene el petróleo
en mucha menor medida que Argentina; pero aunque tenga menos al pueblo
boliviano le rinde más, porque el 20% del petróleo que se extrae el Bolivia va
para las empresas petroleras que los sacan, y el 80% va a las familias bolivianas,
sus trabajadores, sus fábricas, sus escuelas, sus proyectos.
Fíjense queridos lectores si tenemos razones de estar
enojados con la conducción de nuestro país, en la Argentina es exactamente al
revés, el 80% para las empresas petroleras y el 20% para la gente, los pobres,
las escuelas, los proyectos bolivianos, etc.
¿Es posible que usted amigo lector y avisador conociendo esta
estadística y esta revelación que no es un invento nuestro sino algo que se
publica en todo el mundo, digamos que tenemos un gobierno que entrega el país
en vez de gobernarlo?
¿Qué pasaría si esta madame Christine Lagarde va a Bolivia y
le dice a Evo Morales “quiero gobernar su economía, porque las cosas las están
haciendo mal acá en Bolivia”?
¿Quiere que le dé un pronóstico por más dama que sea? Del patadón
que le dan la vuelven por vía aérea a su Estados Unidos natal, en cambio
nosotros, los argentinos, la homenajeamos y el presidente pide que se enamoren
de esta lagartija que viene a molestar la tranquilidad Argentina.
Perdonen ustedes, el director de Estrella de la Mañana hay
momentos que no merece serlo, porque este es un diario serio pero al director
se le sale la cadena. Más cuando lo que está pasando fue profetizado por este
diario cuando todavía el rubio de ojos celestes no habia tomado el poder.
EL DIRECTOR.