Enero y febrero son meses pobres
de noticias pero siempre habrá algo de qué hablar en los bares, en la mesa de
la comida, en el café del desayuno. Porque la comunicación tiene un papel
importante en nuestra subsistencia, esto nos lo preguntamos nosotros y mucha
gente con nosotros y no encontramos una solución o más bien una teoría por
ejemplo: “¿Dónde van a morir los pájaros?”.
Y si es así la primera intención parece una tontería, pero no lo es; es más
bien un misterio. El cementerio de los
elefantes todos cuando se sienten morir van al cementerio solitos y mueren
donde van a morir allí los elefantes. A
la gente la guardan en los cementerios, a los perros y gatos cuando se sienten
morir se van de la casa donde eran dueños y señores, pero piense usted: ¿los
pajaritos viejos donde se van a morir? Muy pocas veces o nunca usted vio un
pájaro muerto de viejo y alguien alguna vez empezó a conjeturar sobre el tema
pero nadie se pone de acuerdo.
Recordamos la teoría del
recientemente fallecido, Quique Albertengo. Según él decía que los pájaros
cuando se sienten morir suben suben suben suben y suben en el aire hasta llegar
a una altura donde se desintegran. Primero nos pareció imposible. Luego
empezamos a pensar en las golondrinas y otro tipo de pájaros que tienen
sobrados misterios en sus vidas, hay pájaros que van una vez por año el mismo
día y a la misma hora van al mismo lugar… y así van todos los años hasta que
dejan de ir porque seguramente ha muerto.
El pájaro tiene sensaciones
especiales como los perros, con su olfato y su oído y otras costumbres que son
emocionantes como por ejemplo que dos canarios en una jaula que ahí si se mueren
de viejos, pero sueltos nadie sabe dónde; cuando muere el canario mayo en dos o
tres días muere la hembra y viceversa.
Marino, una persona muy conocida
en otros tiempos en Cañada de Gómez, gran cocinero que vivía en la calle
Moreno, habia sido sacristán del padre Guillermo Martín, muchos años párroco de
la ciudad. Al morir el padre Martín, Marino se dedicó a la cocina y lo hacía
maravillosamente bien, tenía un tordo en una jaula que caminaba por toda la
casa, se le subía al hombre por ahí salía un ratito a tomar aire y volvía.
Tenemos el testimonio curioso de una mujer que le ayudaba en la cocina a Marino
que cuando este se sintió muy enfermo, se fue a Carcarañá… dónde murió a los
pocos días. En el día y la hora en que fallecía Marino en Carcarañá, al tordo
le agarró como un ataque de locura y se estrellaba y se estrellaba como
queriendo salir. Ese tordo esa noche murió. La versión nos la dio la persona
que por ningún motivo nos mentiría en una cosa así porque tenemos muchos casos
de perros encerrados cuando mueren sus amos que luego salen y se van al
cementerio a morirse en el pie del nicho del mismo, este muere de hambre y de
sed.
O sea que no solamente los
pájaros son un misterio, los perros son un misterio, todos los animales son un
misterio, ¿o acaso nuestra propia vida no es un misterio?
Usted, querido amigo de Estrella,
¿Dónde cree que van a morir los pájaros?