martes, 19 de febrero de 2019

Cansados de Este maltrato!




Entrecerramos los ojos como para meditar y recordar cosas viejas. Y se nos aparecen en el aniversario del Centro Comercial Industrial y Rural de Cañada de Gómez, la cabecera formada por Ricardo Romegialli, Ángel Lovazzano, Storni, el Jefe de policía, el intendente del momento, los concejales y mil asociados al centro que aportaban con su cuota el mantenimiento de una institución modelo que defendía al productor agropecuario, al comerciante, al industrial, a la gente que trabajaba y que construía en realidad el futuro que todos vivíamos. En esas fiestas anuales Juancito Cantori habia visitado unos cien negocios para venderles las tarjetas de la cena del Centro Económico de entonces, que como ya le anticipamos se llamaba “Centro Comercial, Industrial y Rural de Cañada de Gómez” hasta que con el tiempo cambio el nombre, mucho más cerca del hoy que del ayer. Los 100 regalos donados por el comercio y la Industria Regional se sorteaban en esa cena y la fiesta se repetía año a año. Pasó el tiempo y siguieron ocupando los puestos directivos del Centro Comercial Industrial y Rural los próceres de ayer de nuestro comercio, de nuestra industria, del campo hasta que llego a Beltrán López, una gran personalidad del rubro que supo manejar muy bien la institución que recibía.
¿A qué se debe esta nota? recién empieza.
Beltrán López fue llamado a un destino superior digno de su capacidad y de ahí para adelante no solo cambió el nombre del Centro Comercial Industrial y Rural de Cañada de Gómez sino que cambió su estilo, sus sentimientos, ya no se hacían las cenas con regalos, como si la muerte de Cantori hubiese terminado también con la vida de ese Centro tan querido por nosotros y que hoy extrañamos tanto.
Todos conocen en Cañada de Gómez el Diario. Y no es casualidad que SOLO haya un Diario, porque para que ese Diario exista hoy y su director fundador sea conceptuado como decano Nacional de los fundadores de Diario en ejercicio ese Diario fue alimentado por la retiración color de Ángel Lovazzano, por los pequeños sueños de un bancario periodista, por los resultados de algunos festivales de Boxeo y por los beneficios que la música le dio al Diario para que se mantuviera a través de Ronda Musical. Y no es lo único que hubo que inventar, en medio de todo los maremagnos de una lucha perdida siempre en Cañada de Gómez y la zona que no pudo mantener un diario, festivales en teatro el Círculo de Rosario con grandes luminarias internacionales, con los últimos grandes espectáculos que se hicieron en el teatro Real de Rosario (Salta y Oroño)las figuritas estrellas, exposición de cuadros y todo un montón de cosas más que no valen la pena mencionar porque todo el mundo las conoce para que en Cañada siga habiendo un diario local. Hoy uno de los dos diarios que pueden recibir convocatorias a asambleas, edictos judiciales, concursos de precios, etc. Estrella es uno de esos diarios, y el otro es La Capital, el gran decano de la prensa Argentina de Ovidio Lagos.
El fundador de Estrella todavía no se murió y siguió firme con sus tres palabras, que no fueron mentiras cuando buscó un lema para Estrella: Progreso, Verdad, Justicia, pero paralelamente desde el retiro de Beltrán López del Centro Económico, esa gran institución se hizo trizas. No conseguimos audiencia desde hace años para hablar con el presidente, hay una mutual que se maneja como una financiera mas y tiene dos comisiones directivas prácticamente divorciadas y en especial la del Centro Económico absolutamente dedicada al cobro de sus cuotas societarias pero totalmente inactiva y diferente a aquella gran institución que conocimos en 1957 y cuyo presidente Ángel Lovazzano y luego Ricardo Romegialli y Abel, su hijo la hicieron un orgullo local con el cual se defendía, el Comercio, el Agro y la Industria Cañadense.
Hace pocos meses el Centro Económico nos dio un pergamino por nuestra trayectoria, junto con otras grandes empresas locales que recibieron la misma distinción. Casi simultáneamente sus pendieron la publicidad que Estrella le cobraba a solo el 20% del costo de su tarifa, y todo pareció una broma de mal gusto: “le cortamos la publicidad pero te damos un pergamino”. Antes de pensar que era una broma quisimos una audiencia con su presidente actual, cosa que nos fue negada.
Un aviso que lo único que nos daba a nosotros es la satisfacción de que una excelente empleada del centro Económico llenara todas las semanas un espacio con informes de eventos que se hacían en la zona y que Estrella le interesaba dar a conocer y no cobraba para ello.
Tal vez a mucha gente le duela este editorial. Pero a nadie le va a doler mas que a nosotros porque borroneados por una maculopatía injusta y que nos hace ver todo borroso se adivinen también algunas lagrimas donde se reflejaban algo desfigurados por las mismas el rostro de Ángel Lovazzano, Don Ricardo, Abel, Abate, padre e hijo, Carlos Ferraro, Juancito Cantori y muchos más.
Sequemos no los ojos y sigamos adelante como hizo Beltrán López. Nuestro gran amigo de toda la vida.
Eso si… Dios nunca nos abandona.
EL DIRECTOR.