lunes, 13 de mayo de 2019

¿QUE PERIODISMO QUIERE LA GENTE?




Hablamos en estas mismas columnas del legado de un grande del periodismo argentino fallecido ya hace tiempo, el judío argentino Bernardo Neustadt.
Todos lo recuerdan siempre estuvo de la mano de quienes mandaban en la Argentina y eso le producía severas críticas a su periodismo formal positivo, valiente y generalmente favorable a las personalidades que mandaban en el país.
Mucha gente le decía que era un periodista para los que gobernaban y tenía su seria contra entre sus lectores. Pero Neustadt cada vez que le hablaba a doña Rosa como él llamaba a sus televidentes jamas se equivocaba.
Nos vimos con él en la oficina de Enzo Ardigó en Buenos Aires junto al obelisco y en esas charlas entre amigos se dicen cosas que uno no se anima a publicar, allí conocimos a un judío diferente, no apegado a intereses económicos ni al dinero y generalmente una figura periodística muy importante para los gobiernos de turno eso motivaba que la oposición del gobierno de turno consideraba que Bernardo estaba haciendo lo que hoy hace Lanata con Clarín, contratado para destruir a un partido político o a un grupo  de políticos en el gobierno  sin cruzarse de vereda haber como se ve desde la vereda de enfrente las verdades que uno cree que está respetando. Bernardo Neustadt se murió, hubo pocos homenajes y creemos que no fue justo que así fuese. Si uno tiene a veces en la duda como periodista que tomar parte a favor de dos en disputa nosotros tenemos una norma si nuestra inteligencia no nos llega a discriminar los valores en pugna y tomar partido por uno u otro, nuestro periodismo elige lo más fácil y lo más importante, apoyar a quienes mandan y tiene la parte más fea de las disputa. 
En realidad  en 62 años la gente alguna vez nos vio a favor de algún militar que despojo del poder a alguien que estaba haciéndole mucho daño al país, y eso para nosotros era motivo suficiente para volcarnos en contra de quien siendo gobierno súbitamente se olvida de sus promesas al soberano.
A nosotros nos vieron en este pequeño diarito hasta estar de acuerdo los primeros días con la revolución de Videla. Cuando nos dimos cuenta de nuestro error fuimos lo contrario y nos costó la cárcel. Cuando subió Alfonsín lo mismo el gran radical tuvo que irse 6 meses antes de terminar su gobierno. Cuando subió Menem llegamos a decir que Menem y Cavallo habían logrado estabilizar la moneda argentina y antes que termine su segundo gobierno le pedíamos a los militares un golpe de estado y estos dos señores en la cárcel. Todos saben lo que paso con De La Rúa a quien por 7 ediciones consecutivas Estrella de la Mañana le pidió la renuncia por su falta de talento y sus tremendos errores. Kirchner fue otra cosa y su mujer Cristina su sucesora dejó muchos pelos en la gatera que no le hacían honor a Néstor. Al subir el actual presidente si usted busca el archivo de Estrella solo se va a encontrar con una crítica al comienzo de su mandato: un hombre que nació rico, vivió rico y mezclado con los altos capitales y oligarquía jamás puede ser un buen gobernante de un país con tantos pobres como hay en la Argentina.  Y ahí tampoco nos equivocamos y recordamos en estos días en que Macri es más pasado que presente estas coincidencias que a muchos de nuestros lectores se les ha escapado analizar.  Hoy no existe otro camino que Cambiemos. Pero no el partido que cambiemos de gente decente y patriota para manejar la Argentina.
EL DIRECTOR (83 años)