Empezaba el siglo y una noticia conmovía a los cañadenses,
habían asesinado brutalmente a nuestro amigo y colaborador Orlando “Tito”
Rescia.
Desde joven fue un chico raro pero bueno, con casi todos los
vecinos se llevaba muy bien en la calle Pellegrini cerca de Brown. Habría que
pintar un poco lo que era Tito Rescia porque en él confluían los que creían en él,
los que no creían en él, los que lo querían mucho y los que por ningún motivo
lo odiaban.
Tito siguió la línea de Jaime Press (decía Jaime: “el día
que yo cobre un peso para armonizar a alguien perderé todos mis poderes para
ayudar a la gente”) otro día hablaremos de Jaime Press , un fenómeno pero hoy
nos acordamos de Tito a quien nos gustaría
tenerlo vivo, como amigo, siempre dispuesto a darnos una mano en sus micros en
Estrella o en “El Globo” de Atila Jartti
, donde hay casi 300 micros de él en otros tantos videos perfectamente cuidados
y archivados . No vamos a negar que no fuera una atracción mutua la de Tito y
Estrella, sino algo que se fue cimentando en el tiempo. Poco a poco Estrella
fue analizando sus mensajes creyendo en ellos cuando tuvimos pruebas y testigos
que nos dejaron en su momento sorprendidos de su poder de videncia, recordamos
el caso de un gran amigo nuestro José Simez, estaba soportando un cáncer en su
casa y su esposa nos dio una camisa de él y nos pidió que vea si Tito lo podía
ayudar con su enfermedad.
Fuimos de Tito a los días y mostrándole la camisa y sin
decirle de quien era, Tito nos miró fijo y en 15 segundos nos dijo: este hombre
se muere. Me sorprendí, podía haber
llevado una camisa mía o de alguno de mis hijos. Ese día empecé a creer en que
por lo menos poderes de videncia tenía, otra gente habla de cosas mayores pero
no es verdad o al menos nadie nos ha probado que Tito Rescia cobrara las
visitas a su consultorio de calle Brown. Hasta que un día apareció apuñalado brutalmente
sumiendo a mucha gente en gran tristeza. Tito era amigo de todos y existen 300
micros o algo menos en la colección de” El Globo “de Atila Jartti que filmaba
todos los días martes, algunos muy interesantes. Se vendió la casa de Tito, se construyó otra,
pero al parecer según versiones existen raros fenómenos y sonidos donde antes
estuvo su casa antes de la demolición, en la foto se ve Tito con Hugo Bonfigli
y Atila Jartti en la casa de éste último donde se grababa “El Globo”.