El pueblo argentino festejó como si fuese un campeonato
mundial de futbol que el pueblo haya recuperado el manejo de la Argentina que
se haya terminado la era Macri y todas sus mentiras. La Argentina festejó de
punta a punta el final presumible de una dictadura y entrega de soberanía que
no se puede leer en ningún libro de historia Argentina.
Todo lo malo que se puede hacer siendo presidente de la
República, Mauricio Macri lo hizo. Se paso echando la culpa a gobiernos
anteriores, cuando el mismo estaba sucio hasta la cintura, enterrado en una
histórica estafa al país. Por medio del uso del Correo Argentino.
Estamos sin duda ante el peor gobierno argentino desde
Rivadavia a la fecha nuestras portadas insolentes y hasta bocas sucias no
entendían como un argentino podía entregar a un país como lo hizo Macri con el
F.MI..
Ahora sabemos que no estábamos equivocados por eso mañana nos
vamos de dedicar a publicar cronológicamente los titulares de primera plana de
este pequeño Diario. Aunque bien podríamos decir de este pequeño gran Diario
que se animó a publicar lo que otros no, arriesgandos como siempre a una nueva
clausura luego de las tres que ya soportó en su historia de 61 años. Lo primero
que dijimos antes de la elecciones de 2015 es que “jamás un rico podrá ser un buen presidente en ninguna parte del
mundo”.
La historia siguiente y reciente nos demostró una vez más que
nuestro criterio era exactamente lo que estaba por afrontar Argentina. Sus
primeras palabras fueron basta de futbol gratis en Argentina los que quieran
futbol que paguen, entre otras barbaries que hizo este oligarca infiltrado en
la política: después vino, el que quiere estudiar que pague, nada de remedios
gratis para los jubilados, bajar los haberes de los mismos y cerrar escuelas y
universidades porque eran caras para la Argentina. Queremos que nuestros
títulos en estos tres años y medio testifiquen de qué forma hemos defendido a
los argentinos y a las argentinas de la invasión oligarca más temible de la
historia Argentina. El triunfo de los Fernández se festejó toda la noche
aliviándoles a los argentinos de tener que seguir soportando “Esta pesada
herencia” que casi nos convierte en un barrio más de New York. Para nosotros no
cabe otra actitud de un caballero que la renuncia inmediata y el retiro de la
casa Rosada y las comodidades de Olivos pero claro estamos hablando de gente
con moral y buenas costumbres. No precisamente del señor Mauricio Macri.
EL DIRECTOR