lunes, 25 de noviembre de 2019

EL TEMOR A LO PEOR




Mauricio Macri tienen muchas razones para temerle a quedarse sin guardia personal, sin gendarme cerca por las dudas, y más a mano de cualquier pobre o no tan pobre que ha perdido su trabajo, su dignidad y ha sufrido como sufrió el pueblo argentino, la peor presidencia de la Argentina desde el 25 de mayo de 1810.
Le preguntamos a nuestros historiadores, que son tres y son muy buenos, y no se recuerda un desparpajo, un cumulo de mentiras tan vergonzantes como las que usó en estos últimos 5 años el barra brava de Boca, Mauricio Macri.
Son muchos los millones de argentinos que hoy odian al presidente Macri. Y no lo odian porque el pueblo argentino sea malvado, exagerado o se deje llevar por impulsos momentáneos. Macri comenzó mintiendo hace 5 años, claro que el primer año de estos 5, sus mentiras eran dulces: “ayudaremos a los viejos”, “haremos fábricas para que todos tengan trabajo”, “basta de ponernos de rodillas delante del Fondo Monetario Internacional”, “que la juventud tenga los mejores establecimientos para estudiar”.  Y tantas cosas más, que como el argentino es un tipo bueno se las creen todas. Y se las creyó a Macri, que desde el primer día que fue presidente sacó las uñas y los colmillos de Drácula apenas se sentó en el sillón de Rivadavia.
No es casualidad que lo peor de la política Argentina se haya recostado hacia Macri. La gorda insufrible de Carrió no dejó una por hacer, y no quisiéramos estar en su gordo pellejo si se tiene que ir del Congreso de la Nación, que es el único tapial que la separa del odio de la gran mayoría de la gente. Estamos preocupados también por esa manifestación sin sentido a la que llama Macri tres días antes de irse del poder. ¿Que les hará decir a los chicos comprados con banderas de raso en esa oportunidad? : “Si se puede, que siga Macri en el poder”. “Si se puede, Donald Trump lo ayudará a seguir gobernando la Argentina”.
Todo lo que nosotros tenemos para decir es feo, y nuestro Diario siempre buscó de ser lindo, compañero, sincero y justo. Por eso no nos gustaría extralimitarnos, aunque dadas las circunstancias que tuvimos que vivir en estos últimos 4 años, la verdad, no superó este hombre las cosas que podemos decir de él. Hasta no verlo lejos, y en lo posible en algún otro país del mundo, porque acá va a ser imposible que pueda vivir, el pueblo argentino no respirará tranquilo.
¿ Se puede vivir sin Macri?: Si que se podrá, y volverá a ver usted querido lector, volver a renacer la risa y si bien todo al principio será muy duro siempre será mejor que esta tétrica y lamentable presidencia de un incapaz y delincuente del que ya todos han dado pruebas y ácidos comentarios. Alberto Fernández goza de la confianza del pueblo, del peronista y del radical, y con seguridad también del socialismo. Los ojos grandes y asustados de Macri son una mala caricatura de alguien que ya está incapacitado para hacerla mejor, pero se dejó tentar por su vieja profesión de caricaturista.
Si, se puede vivir sin Macri… y verá usted argentino, que lindo que es.
EL DIRECTOR.