Consciente
de que no voy a dejar de trabajar y que quiero delegar la dirección de Estrella
al cumplir 85 años en octubre, empiezo a buscar temas nuevos para que la vieja
Estrella nacida en el 57 siga siendo el Diario del Pueblo.
En
ningún momento pensé en dejar de trabajar, porque la gente que deja de trabajar
se enferma y se muere. Mucha gente se jubila, sigue trabajando y no envejece y
de eso puede dar fe cualquier lector y amigo de los que le sobran a este
Diario.
Es
el sueño que tengo. No he perdido la memoria o mejor dicho no he perdido toda
la memoria y algunas cosas que pululan por mi cabeza pueden servirle a la vieja
Estrella convertida en una nueva bajo la dirección de otra gente y conmigo como
un colaborador más, pese a ser el fundador, el creador y el dueño, junto con mi
familia de este, el único diario popular en el sur santafesino junto con La
Capital, que tiene otra categoría, es decir, de nivel nacional. Por esa razón
todos los clubes, mutuales, cooperativas, cooperadoras, bibliotecas, museos,
entidades e instituciones en general, etcétera en la Provincia de Santa Fe
tienen la obligación legal de publicar 3 avisos con un mínimo de 15 días de
anticipación porque de lo contrario es nula la actividad y/o operación que se
quiere hacer y realizar. Simplemente que para comprar algo o hacer cualquier
cosa usando dinero que es de una comunidad y de una sociedad hay que hacer las
cosas bien y dejar en claro lo que se hace, de eso vive Estrella y nos
enorgullece y nos honra que así sea, porque si tienen que ir a hacer un aviso
al Diario La Capital, ese gran Diario Rosarino con seguridad le va a salir 20 o
30 veces más caro que publicarlo en Estrella. He aquí que casi todos vengan a
nosotros.
En
buen romance, queremos que mientras yo viva el sabor especial que tienen las
páginas de Estrella según todos me dicen no desaparezca, deje de existir y sea
olvidado.
Sigamos
manteniendo a Cacho Dinamita, a Saturnino, a los Jubilados, a las Jubiladas Oligarcas, al Bebé, al Viejo
Bizcocho, a mis caricaturas, guiones, tiras, dibujos y pinturas, al humor, a la
comedia, etcétera, etcétera.
De
ahí que para exprimir a mi cerebro ya viejo pero todavía con recuerdos,
anécdotas y memorias frescas pueda seguir agregándole las cosas que a la gente
le gusta, a veces cosas intrascendentes pero que en realidad son las que más
valen, interesan e importan y le dan sabor a un medio de comunicación, en este
caso a un diario como Estrella.
Esta
es la primera nota de Atila Jartti Tutti Frutti. Que va a ser como si alguien
va a un supermercado que tiene de todo y que por eso usted compra mucho,
inclusive cosas que ni siquiera necesita.
Como
yo sé que hay mucha gente que no me quiere pero hay muchísima más que si me
quiere y me respeta, sé que esto les va a gustar y arranco antes de tiempo para
llegar entrenado a octubre.
El
libro Chispazos fue una éxito absoluto y total y más para los que me quieren y
admiran las cosas que yo he hecho a lo largo de toda mi vida y seguramente
habrá gente que considera una pavada a esas 300 páginas de anécdotas, recuerdos
y memorias. A las ganancias económicas y financieras producidas por ese libro
las doné el total beneficio al hogar de la niña de Cañada de Gómez y por
supuesto, no puedo soslayar y eludir a mi amiga Stella Clérici, la
superintendenta de Cañada de Gómez.
Hasta
cualquier momento…