sábado, 29 de agosto de 2020

ATILA JARTTI, TUTTI FRUTTI.

REVISIONISMO HISTÓRICO.

Pasó el Día de San Martín y hay un loco que quiere incorporar un revisionismo histórico sobre la batalla de San Lorenzo.

Un Historiador eleva al carácter de prócer a un soldado que se interpuso ante una bayoneta española, recibiendo el golpe que iba a quitarle la vida a nuestro General San Martín en plena batalla.

Según este Historiador, el grito de Cabral, el soldado heroico fue:

  Muero contento, hemos batido al enemigo.

Otro revisionista desmiente este hecho: Dice que el Sargento Cabral en realidad dijo:

- ¡Ay! Reverendo hijo de…!!! Hijo de p…!!! La p*** madre que te parió!!!

¿Qué piensa usted?

FIN DE UN ROMANCE.

La pulga Messi pegó un portazo y se fue del Barsa.

Acaba de producirse una revolución en el mundo de los pases porque ahora cualquiera puede intentar contar con el mejor jugador del mundo hoy en día, en la actualidad.

EL BARRIO DOCENTE SE VA PONIENDO LINDO.

En principio a todos les parecía demasiado lejos el barrio docente, otra de las grandes obras de Stella Clérici. Nos parecía demasiado lejos y demasiado descampado, habia que llegar o salir por camino de tierra y las casitas solas sin la mano del hombre y la mujer no eran lo que son hoy. Casas hermosas, frentes con plantas, nuevas y frescas veredas, varios caminos con afirmado para llegar o para salir tanto sea por Centenario y/o por otras calles.

Estamos convencidos de que antes de que pasen 10 años va a ser un barrio conectado con Cañada de Gómez por otras nuevas viviendas, por buenos pavimentos y por toda la clase de cosas que hace esta súper intendenta que tenemos para convertir en realidad sueños lejanos e inconclusos.

 

EXISTE UN GRUPO IMPORTANTE DE HINCHAS DEL CLUB TIC TAC.

El hecho de que el club Tic Tac haya cambiado de género, el hecho de que ya no funciona como sede social y deportiva, para que sus socios jueguen al truco, chinchón, póker, black jack, o hagan largas mesas para charlas cotidianas y de café y todo parece demasiado vacio y especialmente lo único que no tendría que faltar es lo que está faltando, la cancha de básquet. A menudo aparecen socios de Tic Tac y nos exigen alguna publicación que nosotros no le negamos porque no podemos negar que somos hinchas de Tic Tac, como lo fuimos siempre, toda la vida y que hay miles que piensan igual que nosotros. Muchos clubes lloraron pasar por situaciones parecidas a la de Tic Tac hoy, y en el presente tienen una entidad totalmente recuperada para servir para lo que fue creada.

Tic Tac- Tic Tac – Tic Tac – Tic Tac… Todo parece como una bomba a punto de explotar y si eso ocurre va a haber miles de cañadenses felices que extrañan a los equipos de las cebras coloradas.

Dicen que los viejos se olvidan de las cosas y puede ser cierto pero algunas personas de edad como quién escribe que el 21 de Octubre cumplirá 85 años, parece que la memoria y el recuerdo de las cosas vividas, el tiempo lejos de borrarlas las saca a relucir.

Mi gran amigo de la infancia Juan Carlos Etchart, hijo del gran rector del Colegio Nacional en donde hice la secundaria, junto con él y otros grandes amigos, fue mi mejor amigo. Me había enseñado fotografía en la peña rosarina y recibimos hace exactamente 65 años la invitación para participar en un concurso fotográfico en Capilla Del Monte. Conejo que así le llamaba yo y todos a aquel gran muchacho fallecido a temprana edad, me invitó y fuimos con muchas ilusiones los dos solteros aún, a ese concurso fotográfico. No lo ganamos pero los dos sacamos un diploma de distinguidos y conocimos a un santiagueño que se llamaba o se llamara todavía Guillermo Matazh. Era farmacéutico y un tipo de 10, desde ese día, ningún fin de año nos quedábamos sin su tarjeta de salutación, los santiagueños son así. Desgraciadamente yo no fui tan coherente y consecuente pero algunos fines de año me acordaba de él y le mandaba alguna tarjeta, quiere decir que esa amistad seguía viva, como ocurre siempre con los santiagueños, gente de otro planeta.

Yo tenía de dibujante a Carlos Petri para hacer folletos para todo el país y el viajante era Carlos Ciani, hoy en Italia, que no deja de venir todos los años a verme y a saludarme, en cambio, Carlos Petri falleció de lo mismo que me operaron a mí en 2010, un año después. Fue con mucho miedo a esa operación y lo sentí mucho porque era un gran artista y una gran persona. Pero al dejarme solo, yo tenía que visitar a los clientes, sacar las fotos de las maquinas, hacer el diagrama publicitario, retocar las fotos, revelarlas primero y solo, hacía todos los trabajos. Cuando me surge ya solo trabajando en el rubro publicitario y propagandístico, un cliente de Santiago del Estero, la firma Campitelli fabricaba todos elementos para la explotación de la vid, ya no vendían arados sino escardillos y cosas para explotar las vides y hacer el rico vino.

Si sigo con este relato, usted se queda sin el resto del Diario por eso la sigo mañana o pasado o cuando pueda, pero le va a interesar.