EL SUICIDIO DEBE SER UN TEMA TRATADO CON MUCHA PRUDENCIA

En momentos tan duros como los que vive Argentina hoy, donde aumenta día a días la problemática de sobrevivir a una crisis no esperada y que el actual gobierno queremos creer, está tratando de encaminar hacia soluciones, hablar de suicidios tendría que estar prohibido.
 El suicidio que muchas veces sorprende a la gente, porque no entienden el origen del motivo, tendría que tener un tratamiento oficial y hasta quien sabe si no alguna materia terciaria obligatoria por varios motivos. Pero el primer motivo es que se ha demostrado que el suicidio es contagioso y nosotros recordamos en Cañada de Gómez y la región gente ha decidido terminar con su propia vida inexplicablemente sin que la gente supiera el motivo real que pudo haber tenido el suicida para llegar a semejante acto.
No sabemos si existe una secretaría o una profesión o algún sistema de «atención al suicida».
Hace pocos días en Cañada de Gómez una querida docente se quitó la vida. La prensa local entre los que nos incluimos no hizo de este suceso un tema de comentarios ni siquiera algunos medios publicaron la noticia policial que esa sí es nuestra obligación, pero nos quedamos solamente con la noticia fríamente expresada y sin hacerle como se hace a nivel nacional todo el circo q ue se arma alrededor de un casi de este tipo. La materia podría llamarse sociología atención al suicida. En esa materia no solamente se le enseñaría al que tenga angustias y depresiones peligrosas para que no llegue al suicidio sino que en esa misma materia se debe orientar a la gente para auxiliar a gente que pudiese tener problemas serios y pudieran pensar que la solución es el suicidio.
Pensamos varias veces en este tema en los últimos años y estamos seguros que mucha gente aunque no lo reconozca más de una vez habrá estado cerca de una idea suicida. ¿Cómo actuar?¿Cómo ayudar? Cómo se puede actuar para evitar que una persona se sienta inclinada a morir y no a vivir, siendo que sabe en el fondo de su razón que la vida tiene muchas cosas lindas, que la vida tiene amor, amistad, alegría, risas y primordialmente la posibilidad de juntar esfuerzos para lograr cualquier cosa que se proponga lograr en grupo como hacen los gordos anónimos, alcohólicos anónimos, etc. por supuesto lo único que podemos hacer nosotros es aportar una idea y darle un mensaje a todos nuestros lectores: cuando se es niño en la escuela, cuando se es adolescente en el colegio, cuando se lleva adelante una carrera profesional en la facultad donde reina la amistad, los intereses comunes. Y hasta cuando llega la jubilación en cualquier actividad pensar que allí no se terminó la vida, no aconsejamos a nadie que se jubile y deje de trabajar.  Les pedimos a todos que lo analicen porque cada edad del ser humano tiene un atractivo, una satisfacción. La muerte es algo que nos llegará quien saber como una bendición a muchos que han sufrido en este mundo, pero que nadie intente torcer los designios que Dios ya tiene escrito para cada uno de nosotros, y cambiar eso es imposible.
Proponemos en el Diario del Pueblo así como existe un grupo de gordos de anónimos y de alcohólicos anónimos que se potencie también la posibilidad de la atención al suicida. Con seguridad que esa actitud Dios la va a premiar en quienes la adopten.
Nos gustaría saber qué opina usted.
EL DIRECTOR