PARA ADEO, HAY PORVENIR

Dos realidades opuestas se enfrentaron el domingo en cancha de El Porvenir. Un equipo, el local, donde no escasean jugadores de jerarquía, tales son los casos de Lisandro Pereyra, Ezequiel Lazo, Maximiliano Trejo o Alan Balbi, tan solo por nombrar algunos ejemplos de volantes o delanteros de gran calidad para nuestro fútbol doméstico. Del otro lado, un mix de experimentados y pibes de las inferiores donde sobresalieron, sin lugar a dudas, los nombres de Nicolás Speranza (17 años) y Zacarías Acosta (18 años) que más allá de la diferencia de presupuesto, pudieron tener un bautismo prometedor en esta empresa llamada "primera división".
El desarrollo del partido favoreció en los primeros instantes al conjunto de Vechio / Villareal, que primerearon al "portavión" con varias situaciones, ante una frágil defensa que no podía hacer pié en el terreno de juego. Por eso no tardó en llegar la apertura del marcador, cuando tras centro cerrado de Alan Barbi el balón se desvía en Gerardo Giallet y se introduce en el fondo del arco. Era 1 a 0 a favor del local, y hasta allí, estaba bien.
De a poco los dirigidos por Civarelli comenzaron a mostrar signos de recuperación, aunque daba la sensación que El Porvenir podía definirlo de contragolpe, a partir de la movilidad de Lazo, la contensión de Torres y el desequilibrio de Balbi. Pero ADEO empezó a mostrar lo suyo, y ya en el primer tiempo avisaba: el pibe Speranza, siempre bien ubicado moviéndose entre los centrales, ensayó una chilena que no pudo impactar de lleno, y el empate lo tuvo Sebastián De Miguel desde una posición inmejorable. Más allá de eso, pareció que El Porvenir terminaba justificando el resultado parcial por lo hecho en los primeros instantes, sacando una diferencia justa.
Durante el segundo tiempo fue la visita quien monopolizó la tenencia del balón. El ingreso de Emanuel Gauto le proporcionó volumen de juego al mediocampo tricolor, en el que sobresalió el trabajo de Jonathan Rivas y Andrés Mercuri. Después de varias situaciones malogradas, ADEO se dio cuenta que el negocio estaba por el sector derecho. Tan pequeño como aguerrido, el lateral Zacarías Acosta trepó una y mil veces por ese costado, y en una de sus incursiones encuentra, tras asistencia perfecta, la cabeza goleadora de Nicolas Speranza para decretar el empate a favor del "portaviones". "Centro de Zaca - gol de Speranza". Una frase que lo dice todo en esta nueva estructura de los de Cañada de Gómez.
ADEO terminó en mejores condiciones físicas que su rival, prevaleciendo en el tramo final y malogrando varias ocasiones, aunque "el porve" también pudo haberlo ganado con alguna contra. En síntesis, por lo hecho en ambos tiempos por los dos conjuntos, el resultado termina siendo justo, en un contexto de partido entretenido en el que la paridad resultó acorde al desarrollo que se pudo observar.


Fuente: www.facebook/ADEOFutbolOficial