jueves, 20 de julio de 2017

INTIMIDADES DE UN VIEJO AMIGO CARTA DEL DIRECTOR A SUS AMIGOS

Descontando desde ya que esto tenga que hacerlo en primera persona y por eso se desacredita, no veo a nadie vivo que pueda contar esta historia: nací dibujante y solo Dios pudo haberme dado esa dote. Gané un concurso de dibujo a los 8 años y aun no sabía escribir en la Pcia. de Córdoba donde participaban todos los alumnos de la escuela hasta sexto grado. Cuando a los 15 años mi  padre me dejó publicar un dibujo en «La Nota Iriondo», un semanario político de Ángel Robledo, y luego publicar una nota despidiendo a un gran director de la escuela normal cuando era un adolescente, hicieron que de pronto mi sangre se mezclara con tinta.   Ya venía dibujando historietas desde los 12 años y creando personajes. Hice el Servicio Militar cuando lo echaron a Perón, y vi llorar a mi padre esos días. Pero quiero sintetizar la historia, para no usar mucho el espacio de esta revista, un profesor de historia, Horacio Fernández Méndez insistía en que yo debía ser pintor porque mis cuadros hablaban y tenía que hacer esa famosa revista de la cual yo le hablaba que nuestra sociedad necesitaba: apolítica al servicio de los pobres, del progreso de la verdad y la justicia. Insistió tanto que un día  frente a lo que era Calzados Carlín en Cañada, al decirle yo que estaba trabajando pero no tenía todavía el apoyo necesario para salir con la Estrella  y dentro de esa Estrella el acontecimiento de la semana me dijo: 
-Yo creí que usted tenía más huevos!
El viejo zorro sabía que así me iba a obligar  a tomar la decisión  y así lo hice.
El 4 de Octubre de 1957 cuando salió al espacio el primer Spuknic Ruso  salió la primera revista Estrella en este mismo formato que salimos hoy en el día del amigo.  
-Le pagaba a imprenta Iermoli con mi sueldo de bancario y unos pocos avisadores que me tenían  miedo por el apellido: todos los Ramacciotti eran peronistas  y me costó mucho convencerlos que yo quería  hacer periodismo no peronismo.
-1960 inauguración de imprenta propia.
- 1961 se comienzan a hacer folletos para las grandes empresas a todo color  con los servicios del dibujante Carlos Petri.
Al estar casado y con tres hijos,  maravillosos de paso,  tenía que trabajar duro y ahora veo a lo lejos  lo arriesgado que fui. 
- Ilia  se equivoca cuando yo ya tenía una sociedad anónima y manda a la quiebra  a las empresas  que mantenían en diario, a mí y a mi familia.  Al quebrar  Vicupiro y Escorsa de Oncativo, Huisi de Mar del Plata, Elio Agustín Groso de Las Varillas, Escopetas Solé de San Francisco, Tortone de Córdoba, Campitelli de Santiago del Estero, Aragno Hermanos de San Jorge, que con sus folletos  venían manteniéndonos a la revista Estrella, a mí, a mi familia y a mis colaboradores. 
-Por su puesto tuvimos que hacer una convocatoria de acreedores  que no pudimos cumplir  pero nadie accionó contra Estrella  y Estrella Rural,  una revista que publicamos y distribuimos gratuitamente en el agro .
- En vez de cerrar la revista, la convierto en un diario Tabloide  de  8 páginas  que salía de Martes a Sábados y lo sigue haciendo hoy. 
- Tres clausuras  de la dictadura militar en 1976  y 74 días de cárcel para mí por una caricatura  pero luego se supo por la influencia del Ovispo Vollati por la defensa que nuestro diario hizo  del cura gaucho Armando Amirati.
-Sorpresa  al salir de nuevo Estrella y salir yo de la cárcel porque se triplican los avisos y la cantidad d  subscriptores del diario.
- Parece imposible no olvidarse de tantas cosas como hicimos para que esta Estrella siguiera viéndose aun cuando sale el sol.  88 Festivales de boxeo, miles de bailes, Exposiciones de cuadros, 12 libros, la tira Cacho Dinamita  que llega al lugar «Star» en la Razón de Buenos Aires en 1993. Hice 300 programas de televisión de El Globo de Atila Jartti que tengo archivados y seguramente quedan en el tintero un montón de cosas que yo no tengo espacio para darles. Voy a cumplir 82 años el 21 de octubre y pese a la maculopatía que me impide leer y dibujar sigo trabajando y seguiré hasta el último de mis días si mis amigos, los de verdad, me siguen ayudando como hasta hoy. Este periódico es el documento de consulta de todos los historiadores. Y nosotros somos una prueba que si hay una vocación hay que respetarla porque trabajar en algo que uno quiere no es trabajar. Según lo dijera cicerón 200 años a/c. 
En Chispazos espero poder contarles con detalles las aventuras y desventuras de una vida dedicada a una vocación. Gracias amigos y los no amigos también por haberme permitido llegar a esta edad siendo la Estrella que se sigue viendo cuando sale el sol. 

JOSÉ ANTONIO RAMACCIOTTI
(ATILA JARTTI)