Hace
23 años Estrella tenía un espacio que se llamaba “Cultura y Espíritu”. El alma
sensible de una mujer seleccionaba de su notable bibliografía espiritual cosas
y frases que regocijaban el alma, que le daban descanso a las ambiciones que
acercaba al amor y alejaba el rencor. Fueron varios años y la gente se
acostumbro a ese pequeño rincón que todos los días encontraba en Estrella, y
les producía gratas sensaciones. ELECE, quien firmaba esas notas en determinado
momento por exceso de trabajo dejó de hacerlas. Mucha más gente de la que usted
imagina nos preguntó porque habíamos dejado de publicar esa sección. Y es
cierto desde que dejó de salir “Cultura y Espíritu” y desde que dejo de salir
la “Columna de Faúl” quedaron dos huecos que mucha gente extraña. Como nosotros
en Estrella somos exageradamente fanáticos de nuestros colaboradores, de
nuestros personajes, de nuestra forma de ser, lo cual explica esta permanencia
casi ya legendaria de un diario acompañando el progreso de la región más rica
de la Argentina. Premiando a los buenos intendentes, a los buenos legisladores,
y por ahí también nos enojamos con quienes traicionan las promesas que se les
hace al pueblo desde una tribuna política pidiendo un voto y luego se le
defrauda en la realidad.
Invitamos
a tantas excelentes plumas que escriben en la región a no dejar en un cuaderno
ni en una carpeta ni en un cajón de algún lugar de trabajo una idea que le haga
bien a la gente consumir, analizar y gozar de ella.
Hoy
pareciera que hablar de amor es algo que corresponda al pasado como si nadie se
diera cuenta que el amor en todos los seres vivos del planeta son justamente la
razón de existir de este mundo hoy
cascoteado por el terrorismo, por la avaricia, por la maldad y por las
traiciones.
Desde
hoy esta columna queda al servicio de nuestros miles de lectores que tengan
ganas de comunicar algún sentimiento, algo bueno, algo que produzca alegría, y
que nos saque un poco de la rutina tan poco sensible y feliz que hoy pareciera
ir ganando el mundo.
La
invitación está abierta y sabemos que hay muchos corazones, muchos más de los
que usted piensa con capacidad de llenar este hueco que hay hoy en Estrella con
amor, con amistad, con buenos consejos y con alegría.
Nunca
nos hemos desdicho que este es el Diario del Pueblo al que solo no pueden
entrar los que no entiendan esta nota que terminamos de publicar.
EL DIRECTOR.